Apple ha estado ofreciendo SOS de emergencia por satélite y asistencia en carretera por satélite en los Estados Unidos de América, pero la expansión de estos servicios se enfrenta a un desafío impuesto por Elon Musk.
El Wall Street Journal informa de que Musk no está contento con la inversión del fabricante del iPhone en Globalstar, un competidor de Starlink. El principal problema son los derechos de espectro, que se dividen en bandas licenciables garantizadas por operadores de satélites como Starlink, Globalstar, Echostar, Viasat e Iridium.
Apple invirtió más de 1.000 millones de dólares en Globalstar para que la empresa pudiera asegurarse los derechos sobre bandas adicionales, lo que supone un desafío para Starlink, empresa propiedad de SpaceX. Por cierto, Globalstar contrató a SpaceX para lanzar al espacio los satélites financiados por Apple.
Se dice que el sudafricano, actualmente muy cercano al presidente estadounidense y a su administración, ha pedido a la Comisión Federal de Comunicaciones que rechace la solicitud de Globalstar de utilizar bandas para formar una nueva red de satélites utilizada por Apple.
SpaceX y Apple ya han trabajado juntos antes, pero no fue una relación fluida. La empresa de Cupertino llegó a un acuerdo con el operador T-Mobile para utilizar Starlink, pero el trato se resolvió mediante «tensas discusiones». Ejecutivos de ambas partes han hablado de conectar iPhones a los satélites Starlink, pero es poco probable que esto ocurra por el momento.